Las nuevas tecnologías, apalancadas por un crecimiento exponencial son una herramienta clave que
el sector público debe incorporar, por eso es importante que debatamos y aprendamos como usar
big data, inteligencia artificial, blockchain e internet de las cosas para mejorar las políticas públicas y
los servicios a los ciudadanos.
Y por sobre todo es fundamental entender que los gobiernos del Siglo XXI deben dialogar, trabajar y
buscar soluciones con los ciudadanos, ongs y empresas. Promover procesos de participación ciudadana,
innovación abierta y crear un ecosistema GovTech, serán los pasos principales para mejorar los servicios
y tener un gobierno más ágil.