Poder gestionar los riesgos de una organización es fundamental para emprender cualquier proyecto. Mirta Difranco, Mg. en Dirección de Empresas y directora del Programa Integral Project Management de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Austral, repasa las claves a tener en cuenta para afrontar riesgos. 

Más de 100 personas participaron del webinar brindado por Mirta Difranco sobre la importancia de gestionar los riesgos. La especialista compartió técnicas y estrategias aplicables a cualquier proyecto corporativo.  

Toda empresa u organización necesita llevar adelante proyectos, ya que “lo único constante es el cambio” (Heráclito de Efeso, 500 a.C.). Siempre que se quiera modificar algo hará falta llevar adelante un proyecto y, de la mano de un proyecto, aparecen los riesgos. Sin embargo, un riesgo no siempre tiene un resultado negativo. “Si hacemos un repaso histórico, el proyecto de Colón fue un fracaso ya que no se alcanzó el objetivo de llegar a Las Indias. Pero esto nos muestra que de un fracaso pueden surgir buenos negocios”, sugiere Difranco.  

Pero, ¿cómo tener éxito en un proyecto?

• Tener un objetivo claro 
• Buena comunicación con el equipo: aprender a escuchar 
• Contar con un plan  
• Identificar los stakeholders 
• Gestionar los riesgos 

Este último punto no siempre es tenido en cuenta a la hora de proyectar algo. Sin embargo, poder adelantarse a los posibles imprevistos que puedan llegar a surgir le permite a una organización ser proactiva y no reactiva. Si bien es cierto que existen proyectos más riesgosos que otros, contar con conocimiento e información hará que el nivel de incertidumbre sea menor.  

Lo que se busca desde la gestión de riesgos es capturar la mayor cantidad posible de información para administrar mejor los objetivos del proyecto. Esto permitirá prevenir y anticipar posibles problemas que puedan llegar a surgir. 

¿Por qué es necesario gestionar los riesgos?

Antes de comenzar cualquier proyecto es importante tener en claro que las cosas pueden no resultar como se esperaba. Esto hará que se planteen planes y objetivos realistas.  

Por otra parte, al conocer los posibles riesgos será más fácil detectar las causas de los imprevistos y encontrar una solución. Y por último, también se podrán aprovechar mejor las oportunidades, ya que estas son riesgos positivos. Contar con una buena gestión de riesgos hará que la calidad del producto final sea mejor.  

Algunos mitos…

• Los riesgos solo se gestionan en proyectos complejos. Un proyecto chico no habilita a ignorar los riesgos. “Si están en algo que no tiene riesgos, no están en un proyecto”. La gestión de riesgos se hace en todo tipo de proyectos  
• Gestionar los riesgos no es difícil, pero implica animarse a decir que las cosas pueden no salir como se esperan. No se trata de ser pesimista, pero sí de pensar cómo accionar en caso de que las cosas no salgan como estaban previstas. Esto dependerá en gran medida de la actitud que tenga la organización frente al riesgo. De todas maneras, siempre va a haber riesgos previsibles y riesgos que no lo sean. 
• Definir una vara para poder medir la magnitud de cada posible riesgo.

El Programa Integral Project Management dictado por Mag. Mirta Difranco en la Facultad de Ingeniería aporta los conocimientos para poder planificar un proyecto, entendiendo cómo declarar el alcance, establecer un cronograma y estimar los costos del mismo, incluyendo en todo análisis el factor stakeholders y los “siempre presentes” riesgos de proyectos.