La actividad se realizó fuera del ámbito hospitalario para generar un espacio distendido y que facilite la reflexión. El propósito de este taller era acercar a los enfermeros a la experiencia de cuidado que tienen los pacientes que llegan al hospital. En esta experiencia hay expectativas y necesidades que cubrir.
Durante la jornada se trató de ver, desde diferentes miradas, la brecha que existe entre lo que se espera y brinda y por otro lado aquellas intervenciones que desde cada lugar de trabajo podemos implementar para mejorar la experiencia de cuidado.
Para el desarrollo de la jornada se realizó previamente:
- La recopilación de las quejas de los pacientes correspondientes al año 2016 donde manifestaron alguna insatisfacción por parte del cuidado realizado por enfermería.
- Durante la semana se pidió a pacientes internados que expresaran lo que era importantes para ellos en ese día.
Ambos materiales fueron impactantes para quienes los trabajaron, uno por ser parte de una realidad cotidiana y el otro por que manifiesta claramente que detrás de cada paciente hay una historia, una expectativa y una necesidad.
Entre los resultados alcanzados podemos destacar:
- La interrelación entre sectores: el diálogo y posibilidad de interactuar personas de diferentes áreas.
- La diferencia en experiencia, en años de incorporación y edades, dieron al momento de reflexión diferentes matices y visiones.
- Leer en un solo paso las actitudes de enfermería que afectan a los pacientes resultó como “un golpe de realidad” pues no lo esperaban y no lo percibían como real.
- La mirada de introspección que generó la actividad para reconocer que en el día a día es tal la demanda que en algún punto se puede llegar a despersonalizar al otro.
- Revalorización del trabajo en equipo y la necesidad de ser solidarios en el trabajo con los demás.
- Identificación de las expectativas de los pacientes y aspectos necesarios para mejorar la experiencia de cuidado.
La Lic. Alejandra Parisotto, Directora de Enfermería, expresó: “Este es un trabajo que exige tiempo e insistencia, ejemplo y coherencia. Desde la Dirección de enfermería tratamos de orientar el plan de trabajo en estrategias que tienden a poner en un rol protagónico al paciente. Dentro de este plan consideramos muy importantes la capacitación específica en los programas de entrenamiento y la simulación y por otro lado la formación humana, pues nadie puede dar lo que no recibe.”